sábado, mayo 31, 2008

La Visitación de María Santísima a su prima Santa Isabel

 

franciscanos.org

 

Cuando el ángel anunció a María el misterio de la Encarnación, le dijo también que su pariente Isabel había concebido un hijo en su vejez, y ya estaba de seis meses aquella a quien llamaban estéril. Poco después, María se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá, Ain Karim, seis kilómetros al oeste de Jerusalén y a tres o cuatro días de viaje desde Nazaret. Llegada a su destino, entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena de Espíritu Santo; y exclamando con gran voz, dijo: «Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno; y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí? Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno. ¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!»

El saludo profético y la bienaventuranza de Isabel despertaron en María un eco, cuya expresión exterior es el himno que pronunció a continuación, el Magníficat, canto de alabanza a Dios por el favor que le había concedido a ella y, por medio de ella, a todo Israel. María, en efecto, dijo: «Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación...»

El evangelista San Lucas no nos ha dejado más detalles de la visita de la Virgen a su prima Isabel, simplemente añade que María permaneció con ella unos tres meses, y se volvió a su casa de Nazaret.

Muchos son los temas de meditación que ofrece este misterio. Conocido el embarazo de Isabel, María marchó presurosa a felicitarla, a celebrar y compartir con ella la alegría de una maternidad largo tiempo deseada y suplicada: ¡qué lección a cuantos descuidamos u olvidamos acompañar a los demás en sus alegrías! El encuentro de estas dos santas mujeres, madres gestantes por intervención especial del Altísimo, sus cantos de alabanza y acción de gracias, y las escenas que legítimamente podemos imaginar a partir de los datos evangélicos, constituyen un misterio armonioso de particular ternura y embeleso humano y religioso: parece como la fiesta de la solidaridad y ayuda fraterna, del compartir alegrías y bienaventuranzas, del cultivar la amistad e intimidad entre quienes tienen misiones especiales en el plan de salvación. Sería delicioso conocer sus largas horas de diálogo, sus confidencias mutuas, sus plegarias y oraciones, sus conversaciones sobre los caminos por los que Yahvé las llevaba y sobre el futuro que podían vislumbrar para ellas y para sus hijos. Parece una constante en la historia de los santos que las almas de Dios se hayan encontrado y entre ellas haya abundado la fraternidad y amistad, el diálogo, las confidencias, todo género de ayuda recíproca. María e Isabel son un modelo.

 
 

Devoción al puridimo corazon de Maria

FIESTA DEL INMACULADO

CORAZON DE MARIA

Una fiesta íntimamente vinculada con la del Sagrado Corazón de Jesús. Los Corazones de Jesús y

de María están Maríavillosamente unidos en el tiempo y la eternidad desde el momento de la

Encarnación. La Iglesia nos enseña que el modo más seguro de llegar a Jesús es por medio de

María; por eso nos consagramos al Corazón de Jesús a través de su Corazón. "Jesús es el

Camino; María es el Atajo".

Al venerar el Inmaculado Corazón de María, reverenciamos no sólo el corazón físico, real, de

nuestra Santísima Madre, sino también su persona como fuente y fundamento de todas sus

virtudes. Honramos expresamente su Corazón como símbolo de su amor a Dios y a los demás.

Después de su entrada a los cielos, el Corazón de María sigue ejerciendo a favor nuestro su

amorosa intercesión. El amor de su corazón se dirige primero a Dios y a su Hijo Jesús, pero se

extiende también con solicitud maternal sobre todo el género humano que Jesús le confió al morir;

y así la alabamos por la santidad de su Inmaculado Corazón y le solicitamos su ayuda maternal en

nuestro camino a su Hijo.

Como ha querido el Sagrado Corazón que esté con Él en el Cielo el amante Corazón de su Madre,

así desea que se le honre a ella juntamente con Él en la tierra.

Entregumonos al Corazón de María diciéndole: "¡Llévanos a Jesús de tu mano! ¡Llévanos, Reina y

Madre, hasta las profundidades de su Corazón adorable! Corazón Inmaculado de María, ruega por

nosotros!"

Reseña histórica de la Devoción

Una práctica que hoy en día forma parte integral de la devoción al Corazón de María, es la

Devoción a los Cinco Primeros Sábados. En diciembre de 1925, la Virgen se le apareció a Lucía

Martos, vidente de Fátima y le dijo: "Yo prometo asistir a la hora de la muerte, con las gracias

necesarias para la salvación, a todos aquellos que en los primeros sábados de cinco meses

consecutivos se confiesen, reciban la Sagrada Comunión y recen la tercera parte del Rosario, con

intención de darme reparación". Junto con la devoción a los nueve Primeros Viernes de Mes, ésta

es una de las devociones más conocidas entre el pueblo creyente.

En una de las primeras apariciones de Fátima, en 1917, dijo nuestra Seora que Luca iba a

quedarse poco más tiempo para propagar la devoción al Corazón de María.

En la tercera aparición de Fátima, el 13 de junio del mismo ao, la Santísima Virgen dijo a Luca:

http://www.iglesiapotosina.org/seccionesvarias/con...amaria/maria/fiestasmarianas/inmaculadocorazon.htm (1 of 4) [8/24/2005 9:39:22 PM]

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"Nuestro Señor quiere que se establezca en el mundo la devoción al Corazón Inmaculado. Si se

hace lo que te digo se salvarán muchas almas y habrá paz; terminará la guerra.... Quiero que se

consagre el mundo a mi Corazón Inmaculado y que en reparación se comulgue el primer sábado

de cada mes.... Si se cumplen mis peticiones, Rusia se convertirá y habrá paz.... Al final triunfará

mi Corazón Inmaculado y la humanidad disfrutará de una era de paz."

El 31 de Octubre de 1942 el Papa Pio XII, al clausurarse la solemne celebración en honor de las

Apariciones de Fátima, conforme al mensaje de éstas, consagró el mundo al Inmaculado Corazón

de María. Los Papas Pablo VI y Juan Pablo II han repetido la misma consagración.

Poco antes de morir Jacinta, de diez años, dijo a Lucía: "A mí me queda poco tiempo para ir al

Cielo, pero tú te vas a quedar aquí abajo para dar a conocer al mundo que nuestro Señor desea

que se establezca en el mundo la devoción al Corazón Inmaculado de María. Diles a todos que

pidan esta gracia por medio de ella y que el Corazón de Jesús desea ser venerado juntamente con

el Corazón de su Madre. Insísteles en que pidan la paz por medio del Inmaculado Corazón de

María, pues el Señor ha puesto en sus manos la paz del mundo."

Por obediencia a su superior eclesiástico y a su confesor, Lucía reveló parte del secreto que le

había confiado nuestra Señora, referente a la devoción al Inmaculado Corazón de María.

La fiesta del Corazón Inmaculado de María fue oficialmente establecida en toda la Iglesia por el

Papa Pío XII, el 4 de mayo de 1944, para obtener por medio de la intercesión de María "la paz

entre las naciones, libertad para la Iglesia, la conversión de los pecadores, amor a la pureza y la

práctica de las virtudes".

El Papa Juan Pablo II recientemente declaró que la conmemoración del Inmaculado Corazón de

María, será de naturaleza "obligatoria" y no "opcional".

Esta fiesta se celebra en la Iglesia, todos los años, el sábado siguiente al segundo domingo

después Pentecostés.

Para meditar

Hay textos en la Biblia que son los primeros en sugerir la veneración al Inmaculado Corazón de

María. Después que los pastores llegaron al pesebre, leemos: "María ... observaba

cuidadosamente estos acontecimientos y los guardaba en su corazón" (Lc 2, 19).

Después que María y José encontraron a Jesús, ya de doce años, en el Templo, "volvió con ellos a

Nazaret, donde vivió obedeciéndoles. Su madre guardaba fielmente en su corazón todos estos

recuerdos" (Lc 2, 51).

Cuando Jesús fue presentado en el Templo, predijo el anciano Simeón: "Y a ti misma una espada

te atravesará el alma" (Lc 2, 35). Palabras que se hicieron realidad bajo la Cruz. Cuando el

Corazón de Jesús fue perforado por la lanza, el Corazón de la Santísima Madre fue traspasado por

una espada de dolor. El Corazón de Jesús latió por primera vez en el refugio del purísimo Corazón

de María, su Madre, y este purísimo Corazón también recibió en espíritu el último palpitar del

Corazón de Jesús.

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ORACIONES

Oración propia de la Novena

Corazón Inmaculado de María, desbordante de amor a Dios y a la humanidad, y de compasión por

los pecadores, me consagro enteramente a ti. Te confío la salvación de mi alma.

Que mi corazón esté siempre unido al tuyo, para que yo odie el pecado, ame a Dios y al prójimo y

alcance la vida eterna juntamente con aquellos que amo.

Medianera de todas las gracias y Madre de misericordia, recuerda el tesoro infinito que tu divino

Hijo ha merecido con sus sufrimientos y que nos confió a nosotros sus hijos.

Llenos de confianza en su maternal corazón, que yo venero y amo, acudo a ti en mis apremiantes

necesidades. Por los méritos de tu amable Corazón y por amor al Sagrado Corazón de Jesús,

obténme la gracia particular que pido (mencione el favor que desea).

Madre amadísima, si lo que pido no fuere conforme a la voluntad de Dios, intercede para que se

me conceda lo que sea de mayor bien para mi alma.

Que yo experimente la bondad maternal de tu Corazón y el poder de tu intercesión ante Jesús

ahora en vida y en la hora de la muerte. Amén.

la Devoción al Sagrado Corazón

Este Viernes 30 de Mayo, se celebro


El Sagrado Corazón de JesúsLa devoción al Corazón de Jesús ha existido desde los primeros tiempos de la Iglesia, cuando se meditaba en el costado y el Corazón abierto de Jesús, de donde salió sangre y agua. De ese Corazón nació la Iglesia y por ese Corazón se abrieron las puertas del Cielo. La devoción al Sagrado Corazón está por encima de otras devociones porque veneramos al mismo Corazón de Dios. Pero fue Jesús mismo quien, en el siglo diecisiete, en Paray-le-Monial, Francia, solicitó, a través de una humilde religiosa, que se estableciera definitiva y específicamente la devoción a su Sacratísimo Corazón.

El 16 de junio de 1675 se le apareció Nuestro Señor y le mostró su Corazón a Santa Margarita María de Alacoque. Su Corazón estaba rodeado de llamas de amor, coronado de espinas, con una herida abierta de la cual brotaba sangre y, del interior de su corazón, salía una cruz.  Santa Margarita  escuchó a Nuestro Señor decir: "He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres, y en cambio, de la mayor parte de los hombres no recibe nada más que ingratitud, irreverencia y desprecio, en este sacramento de amor." Con estas palabras Nuestro Señor mismo nos dice en qué consiste la devoción a su Sagrado Corazón. La devoción en sí está dirigida a la persona de Nuestro Señor Jesucristo y a su amor no correspondido, representado por su Corazón. Dos, pues son los actos esenciales de esta devoción: amor y reparación. Amor, por lo mucho que Él nos ama. Reparación y desagravio, por las muchas injurias que recibe sobre todo en la Sagrada Eucaristía.

 
tambien ver

homilia para el domingo 1º de Junio

DOMINGO IX DURANTE EL AÑO
 
Lectura del libro del Deuteronomio

11, 18. 26-28. 32

 

Moisés habló al pueblo y le dijo:

Graben estas palabras en lo más íntimo de su corazón. Átenlas a sus manos como un signo, y que sean como una marca sobre su frente.

Yo pongo hoy delante de ustedes una bendición y una maldición.

Bendición, si obedecen los mandamientos del Señor, su Dios que hoy les impongo.

Maldición, si desobedecen esos mandamientos y se apartan del camino que yo les señalo, para ir detrás de dioses extraños, que ustedes no han conocido.

Cumplan fielmente todos los preceptos y leyes que hoy les impongo.

 

Palabra de Dios.

 

 

SALMO RESPONSORIAL                                        30, 2-4. 17. 25

 

R.    Señor, sé para mí una roca protectora.

 

Yo me refugio en ti, Señor,

¡que nunca me vea defraudado!

Líbrame, por tu justicia;

      inclina tu oído hacia mi

y ven pronto a socorrerme.  R.

 

Sé para mí una roca protectora,

un baluarte donde me encuentre a salvo,

porque Tú eres mi Roca y mi baluarte:

por tu Nombre, guíame y condúceme.  R.

 

Que brille tu rostro sobre tu servidor,

sálvame por tu misericordia.

Sean fuertes y valerosos,

todos los que esperan en el Señor.  R.

 

 

El hombre es justificado por la fe,

sin las obras de la Ley

 

Lectura de la carta del Apóstol san Pablo

a los cristianos de Roma

3, 20-25a. 28

 

Hermanos:

A los ojos de Dios, nadie será justificado por las obras de la Ley, ya que la Ley se limita a hacernos conocer el pecado. Pero ahora, sin la Ley, se ha manifestado la justicia de Dios atestiguada por la Ley y los Profetas: la justicia de Dios, por la fe en Jesucristo, para todos los que creen.

Porque no hay ninguna distinción: todos han pecado y están privados de la gloria de Dios, pero son justificados gratuitamente por su gracia, en virtud de la redención cumplida en Cristo Jesús. Él fue puesto por Dios como instrumento de propiciación por su propia sangre, gracias a la fe.

Porque nosotros estimamos que el hombre es justificado por la fe, sin las obras de la Ley.

 

Palabra de Dios.

 

 

 

EVANGELIO

 

La casa edificada sobre roca

y la casa edificada sobre arena

 

a    Evangelio de nuestro Señor Jesucristo

según san Mateo

7, 21-27

 

Jesús dijo a sus discípulos:

No son los que me dicen: «Señor, Señor», los que entrarán en el Reino de los Cielos, sino los que cumplen la voluntad de mi Padre que está en el cielo.

Muchos me dirán en aquel día: «Señor, Señor, ¿acaso no profetizamos en tu Nombre? ¿No expulsamos a los demonios e hicimos muchos milagros en tu Nombre?»

Entonces Yo les manifestaré: «Jamás los conocí; apártense de mí, ustedes, los que hacen el mal».

Así, todo el que escucha las palabras que acabo de decir y las pone en práctica puede compararse a un hombre sensato que edificó su casa sobre roca. Cayeron las lluvias, se precipitaron los torrentes, soplaron los vientos y sacudieron la casa; pero ésta no se derrumbó, porque estaba construida sobre roca.

Al contrario, el que escucha mis palabras y no las practica puede compararse a un hombre insensato, que edificó su casa sobre arena. Cayeron las lluvias, se precipitaron los torrentes, soplaron los vientos y sacudieron la casa: ésta se derrumbó, y su ruina fue grande.

 

Palabra del Señor.

 

 

Reflexión

 

 

 

LA VOLUNTAD DE DIOS ES NUESTRA FELICIDAD

1.- Hacer la voluntad de Dios es realizar lo que a El le agrada. Jesús no pide palabras, sino que espera de nosotros hechos, es decir demostrar que lo que decimos con los labios lo llevamos a la práctica. El que cumple la voluntad de Dios es el que de verdad vive el Evangelio. Hacer la voluntad de Dios es llevar a cabo aquello que gusta a Dios, que es de su agrado. Cuando amamos a alguien buscamos hacer aquello que le hace feliz. Al mismo tiempo, dado que Dios nos ama, su felicidad es que descubramos la vida en plenitud, no una felicidad superficial, sino la verdadera felicidad, que consiste en llegar a ser nosotros mismos. Esto nos conduce al segundo sentido de la expresión "voluntad de Dios": hace referencia al gran plan, al proyecto de Dios para la humanidad. Dios nos ha creado para que seamos felices. Los padres que aman de verdad a sus hijos tienen expectativas con respecto a ellos. Desean que ellos desarrollen todas sus capacidades, quieren que ellos hagan libre uso de sus dones para convertirse así en adultos. Esto es aún más cierto en el caso de Dios. El desea nuestra felicidad. El proyecto de Dios no es anular nuestra libertad, sino una invitación a que nuestra libertad sea utilizada plenamente a fin de ser cada vez más, a imagen suya, capaces de amar y servir al hermano, que es el camino más directo hacia esa felicidad que todos buscamos.

2.- Los hombres hemos sido creados para la felicidad. Aquél que es plenamente feliz tiene de verdad el derecho de decirse: "he cumplido la voluntad de Dios en esta tierra". Todos los justos, todos los santos, todos los que han hecho el bien han sido felices de verdad. Jesús sabe que Dios es su Padre, que desea lo mejor para Él y el mundo, a pesar de las contradictorias apariencias. Por eso en Getsemaní y en la cruz se pone en las manos del Padre y dice "hágase tu voluntad". Confía en Dios y es esta confianza la que le da fuerzas para asumir las circunstancias difíciles. Muchos no entienden lo que significa la súplica del Padrenuestro "hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo". Incluso hay quien omite estas palabras, creyendo que Dios nos va a mandar cosas malas. Vattimo, en su libro "Creer que se cree", se pregunta por qué existe la costumbre de decir "que sea lo que Dios quiera", sólo cuando algo va verdaderamente mal y no, por ejemplo cuando te toca la lotería.

3.- Construir nuestra vida sobre la Roca firme, que es Cristo. En nuestra vida existe una contradicción. Por una parte, la oferta que nos hace la sociedad en la que vivimos es de una forma de vida que se presenta cómoda y atrayente a nuestros ojos y que rinde culto al "vive como quieras". Por otra parte, el camino que Dios te ofrece, una senda que exige abandonar el yo a favor del tú y que, además, no es comprendido por los que te rodean. Al elegir seguir el camino del Evangelio debes estar dispuesto a salir de ti mismo para entregarte a tus hermanos. Esta renuncia es inútil si la vives como un sacrificio que has de hacer para conseguir una parcela en el cielo. Sólo tiene sentido desde el amor y desde una conversión profunda que te lleva a hacer tuyos los valores propuestos por Jesús. La felicidad sólo se consigue con la fidelidad, edificando nuestro edificio espiritual sobre la roca firme del amor de Dios. Jesús no promete una vida sin pruebas, Jesús promete que si la casa se construye sobre la roca permanecerá a pesar de los fuertes vientos y tempestades. Nuestra vida permanecerá firme al fin de los tiempos, si construimos sobre las enseñanzas y el amor de Cristo. Lejos de Él será una casa que se construye sobre arena y por consiguiente puede derrumbarse frente a las vicisitudes, calamidades, mal sabores y contrariedades de la vida, puede perderse entre el inmenso desenfreno y malas raíces que nos da el mundo exterior y quedar una y otra vez sedientos hasta arruinarnos. La felicidad del hombre se puede reducir a la ruina, pero si construimos con conciencia sobre la Roca a pesar de las contrariedades, sinsabores, fracasos, dudas, penas, decepciones, desilusiones, amargura, oscuridad, injusticias etc. nada ni nadie nos derrumbará.

Con dinero podemos:

Comprar una cama, pero no un sueño.

Libros, pero no cultura.

Comida, pero no apetito.

Adornos, pero no la belleza.

Una casa, pero no un hogar.

 

Medicinas pero no salud.

Lujos pero no simpatía.

Diversiones, pero no felicidad.

Un crucifijo, pero no un Salvador.

Una iglesia, pero no el cielo.

Y recuerda que lo que el dinero no puede comprar,

Dios nos lo da diariamente sin cobrar!

 

José María Martín OSA

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NO TODO EL QUE DICE: "SEÑOR, SEÑOR"

1. - En las tardes lluviosas y tristes de invierno, en algunos pueblos de la montaña de León, las mujeres se reunían, en torno al brasero, para hilar y charlar. Tardes de filandón. Cuando una mujer hablaba y hablaba y se olvidaba de hilar, otra le decía: dímelo hilando. Las palabras debían acompañar a las obras, no sustituirlas. Cuando las palabras no van acompañadas de las obras, son palabras vacías que no llevan dentro ningún mensaje de verdad. Hace muchos años yo recuerdo una canción que decía, más o menos, así: que todas las palabras son mentira, si no llevan como el pájaro su grano. Las palabras vacías, como las hojas que van y vienen, juguetes del viento son. Ya nos decía el Papa Juan Pablo que la sociedad de hoy, en la evangelización, prefiere a los ejecutores antes que a los simples predicadores. Cuando uno habla y habla del evangelio de Cristo, pero después no se ve por ningún lado en su comportamiento una actitud basada en los auténticos valores del evangelio, decimos simplemente que esa persona es un hipócrita. Si predicamos paz, amor, trabajo, defensa de la justicia y de los más pobres, fraternidad, solidaridad, y después se ve que vivimos como burgueses acomodados, siempre del brazo de los poderosos y de los más fuertes, pues, evidentemente, la gente no nos va a creer. Si rezamos mucho y nos pasamos el día diciendo Señor, Señor, y después nos olvidamos olímpicamente del hermano más necesitado, seguro que, en el día final, el Señor nos dirá: No os he conocido.

2.- Meteos mis palabras en el corazón y en el alma. Las palabras escritas en el corazón y en el alma son palabras que empujan a la acción, son una fuerza y una pasión interior que marcan un comportamiento y una vida. Cuando las palabras que nos arden en el corazón son las palabras del Señor no nos desviaremos del camino y de la vocación que el Señor nos ha marcado. En este texto del Deuteronomio, Moisés, en nombre de Dios, nos dice que si escuchamos los preceptos del Señor, si los tenemos en el corazón y en alma, tendremos siempre su bendición. No iremos detrás de dioses extraños, ni nos dejaremos embaucar por palabras de embaucadores de palabra fácil y vida regalada y vacía.

3.- Por la fe en Jesucristo viene la justicia de Dios a todos los que creen. Aquí San Pablo, una vez más, dice a loa primeros cristianos de Roma que lo que de verdad les salva es la fe en Cristo, no el cumplimiento de la Ley de Moisés. La fe en Cristo es, para San Pablo, fidelidad y compromiso con el evangelio de Cristo, es una fe con obras. La fe no es sólo una creencia racional, sino, principalmente, un compromiso vital. Creer en Cristo es apostar por él, tener su evangelio como libro de cabecera, tratar de vivir a su estilo, defender los valores que él defendió e intentar vivir como él vivió. No se trata tanto de la fidelidad a unas normas, a unos ritos, a unas tradiciones, sino de la fidelidad a una vida, a unos valores, a los valores y a la vida de Cristo.

4.- El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Una casa sin fundamento es fácil presa de los vientos y de las lluvias. Las personas con fundamento son personas equilibradas, resistentes, siempre generosas y vacunadas contra el desánimo. Las personas sin fundamento son personas frágiles y vacilantes, que necesitan el apoyo y el halago constante de otras personas. Si nuestro fundamento es Cristo, aceptaremos el dolor y la pasión de la vida como él lo aceptó, haciendo del dolor instrumento de salvación y redención. Nuestro fundamento es la vida de Cristo, una vida vivida en el amor y por amor, una vida entregada al servicio de los demás. Si intentamos vivir como Cristo vivió, quizá no hagamos milagros, ni seremos aplaudidos por los hombres, pero en el día final él sí nos reconocerá y nos pondrá a su lado, muy cerca de él, para siempre.

 

Gabriel González del Estal

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Y LA VIDA SIGUE

1.- Atrás han quedado celebraciones que, bien centradas, preparadas y vividas, nos pueden haber llevado a un fortalecimiento en la fe y en nuestro ser Iglesia.

¡Ojala que, Pentecostés haya dejado en nosotros ganas renovadas de seguir adelante como cristianos!

¡Ojala que, el Corpus Christi, con Cristo en el centro de todo, haya sido un revulsivo para convertirnos en entusiastas y pregoneros del amor que Dios nos tiene!

¡Ojala que, el mes de mayo, recién acabado, haya sido un camino que nos haya templado el espíritu y nuestra forma de ver las cosas y a Dios mismo, como lo hizo María!

¿Ha sido así? ¿Hemos vivido bien la Pascua? ¿Nos hemos abierto al Espíritu en Pentecostés? ¿Con qué se han quedado las retinas de nuestros ojos en el Corpus? ¿La custodia o Aquel que está dentro de ella?

2.- Sí, amigos. ¡Hay que edificar sobre firme! Flaco favor hacemos a la Iglesia, a nuestra fe y a nosotros mismos si nos quedamos en lo superficial.

"Señor, Señor"; ¡lo decimos tantas veces y de tantas maneras! ¿Pero, lo decimos de corazón? ¿Llegamos al fondo de las cosas? Hay amistades de primera y, por qué no decirlo, también de segunda.

Las amistades de primera son aquellas que son capaces de sacrificar, un momento, una felicidad y todo lo que haga falta para no perder a un amigo y, sobre todo, por servir y seguir a ese amigo.

Las amistades de segunda, por el contrario, vienen abanderadas por la simple apariencia: hoy sí, pero cuando no me conviene: ¡pues no!

¿Cómo es nuestra amistad con Cristo? ¿De primera o de segunda? ¿Sincera o ilusa? ¿Contrastada por el Evangelio o adornada por la recepción puntual de sacramentos y más sacramentos?

3.- Sí, amigos. Han pasado las principales solemnidades de nuestra fe cristiana pero, ahora, y sólo ahora, es donde, con las cartas sobre la mesa, se ven aquellas amistades que son verdaderas y bien fundamentadas (en Jesús) y las que, por lo que sea, son hoja que el viento se llevó.

Al retomar este tiempo ordinario, que dejamos allá por el 3 de febrero, tomamos conciencia de lo que somos y de lo qué queremos ser. Y, el domingo, Día del Señor, es un día especialmente señalado para levantar con solidez y con fundamento nuestro seguimiento a Jesús. Sin Él, y no hay más que contemplar el panorama del mundo, somos marionetas de un gran guiñol pagado por los poderosos. Sin referencia a Dios, y no lo olvidemos, nuestra conciencia deja de ser objetiva y corre el riesgo de ser subjetiva, caprichosa y cambiante. Si no tenemos las cosas claras, Dios tiene la última palabra, nuestro mundo, nuestra sociedad y nuestro futuro será una casa sobre arena movediza, traicionera y con resultados catastróficos. ¿Qué es exageración? ¿Qué el hombre se las puede valer y entender por sí mismo? ¿Hay algo más arenoso y frágil que el hombre, su ideología, sus sistemas, sus modas, sus proyectos o su sentirse súper-poderoso?

4.- La gran obra que hemos de levantar, no ha de contar solamente con el elemento humano. Siempre es bueno recordar aquel constructor que, arrogante y soberbio, estaba convencido de controlar e imponerse ante todo. Un día, un obrero, le dio una gran magistral lección: "usted sabrá mucho, habrá estudiado otro tanto, nos humillará y nos tratará de ignorantes pero, le recuerdo, que sin el cemento, sin el agua y sin nosotros, usted no es nada, irá a la ruina". Con la obra de Dios pasa tres cuartos de lo mismo. ¿Qué es nuestro apostolado sin Dios? ¿De qué sirven nuestras iniciativas, si en nuestras encuestas, dejamos de lado la respuesta de Dios? ¿Por qué nos desazonamos cuando no hay proporción entre esfuerzo y fruto recogido?

Que este Tiempo Ordinario contribuya a que sepamos elegir entre lo bueno y lo malo, entre crecer hacia arriba o en conformarnos con lo de abajo; en ser colaboradores del Señor o, en pensar, que somos autónomos y que por lo tanto, todo, depende de nosotros.

Intentemos edificar en serio. Con la ayuda de Dios. Huyendo de la comodidad y de una fe que no tiene más compromiso que el hecho de haber sido bautizados.

Es el momento, y todos los domingos lo intentaremos, de tener los pies en el suelo pero caminando a una con Dios. La vida sigue, y lo bueno de todo ello, es que Jesús va por delante dándonos pistas para no perdernos y ofreciéndonos buena piedra para que sepamos construir y edificar con seguridad su Reino en este mundo.

 

Javier Leoz

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guión de misa para el 1º de Junio de 2008

 

Celebrando

la Vida

en el

Nuevo Milenio

Guiones para la celebración de la Cena del Señor

Ciclo "A"

Miguel Ángel Osimani

EDICIONES BETANIA

 

 

 

DOMINGO 1º DE JUNIO

DOMINGO 9º DURANTE EL AÑO

 

PREPARACIÓN: 

Antes de la salida del celebrante

 

Nos encontramos nuevamente, como todos los domingos, reunidos en el nombre del Señor para celebrar la Eucaristía, que es una invitación al compromiso temporal de la fe. Concretamente celebramos hoy el domingo noveno durante el año.

 

AMBIENTACIÓN: 

Luego del saludo inicial y antes del acto penitencial

 

Hoy el Señor es bien claro: quien quiera ser verdaderamente cristiano debe seguir los caminos trazados por Dios, siendo fiel a Él y renunciando a los demás dioses. No bastan las súplicas ni los homenajes al Señor; la sola fe, la devoción e incluso la confianza en Él no basta: hay que cumplir la voluntad del Padre que está en los Cielos; quien así lo hace es el que realmente edifica su casa sobre roca.

 

1ª. LECTURA:  (Dt 11, 18. 26-28. 32   (Ver texto)

 

Moisés dice a Israel que el pueblo amado por Dios tiene que hacer continuamente una opción y según la dirección de su elección, será bendecido o maldecido por Dios.

 

SALMO RESP.:      (30, 2-4. 17. 25)    (Ver texto)

 

                    R.   Señor, sé para mí una roca protectora.

 

2ª. LECTURA:     (Rm 3, 20-25a. 28)     (Ver texto)

 

San Pablo nos manifiesta que lo que salva es la fe en Cristo, pero una fe que supone y consiste en una respuesta a Él, una adhesión a su persona y a su Evangelio.

 

EVANGELIO:    (Mt 7, 21-27)    (Ver texto)

 

Hoy Jesús nos dice que el hombre sólido que entrará en el Reino construido en Dios, es aquel que ha cumplido la voluntad del Padre.

 

ORACIÓN DE LOS FIELES:

 

CELEBRANTE:

 

Dios es nuestro Padre y quiere que nos dirijamos a Él con verdadera confianza de hijos, por eso ahora, presentémosle nuestras súplicas por las necesidades de la Iglesia, del mundo y de todos nuestros hermanos.

 

GUÍA:  A cada una de las peticiones responderemos orando:

 

"PADRE, QUE CUMPLAMOS TU VOLUNTAD"

 

v Padre, porque queremos que todos los hombres del mundo escuchen a tu Hijo en la voz de su Iglesia y en la de su Vicario en la tierra, hoy Benedicto XVI, te pedimos...

 

v Padre, porque necesitamos construir una Iglesia diocesana que, guiada por su Obispo, verdaderamente anuncie con su fe y con sus obras, el Evangelio de tu Hijo, te pedimos...

 

v Padre, porque queremos que en nuestra patria se terminen las estructuras radicalmente injustas y reine una verdadera justicia cristiana para todos sus habitantes, en especial los más pobres, te pedimos...

 

v Padre, porque tantos necesitados y sufrientes del mundo, puedan ver renacer en ellos la esperanza, por la manifestación de tu amor en nuestras actitudes concretas hacia ellos, te pedimos...

 

v Padre, para que todos los que formamos esta comunidad, edifiquemos nuestras vidas sobre roca al actuar, en toda ella, según tu voluntad, te pedimos...

 

CELEBRANTE:

 

Dios y Padre nuestro, ponemos en tus manos estas súplicas y te pedimos que nos concedas todo aquello que Tú conoces que necesitamos para poder alcanzar la vida eterna. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor.

 

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS:

 

Junto al pan y el vino, es necesario que presentemos a nuestro Padre del Cielo, un corazón dispuesto a cumplir su voluntad en todos los momentos de nuestra vida.

 

DIÁLOGO DEL PREFACIO:

Al iniciarse el Prefacio (antes de "El Señor esté con vosotros")

 

Unamos ahora nuestros corazones y nuestras voces para elevar nuestro canto de acción de gracias al Padre, porque en Cristo nos ha dejado el camino perfecto para ir a su Reino.

 

COMUNIÓN:

 

Entrar en comunión con Cristo nos significa también entrar en comunión con sus sentimientos, con su vida, con sus enseñanzas y con todos nuestros hermanos, con sus vidas y sus necesidades, de pan, de trabajo, de cultura y de Dios.

 

DESPEDIDA:

 

Al regresar a nuestros hogares lo hacemos con el compromiso de vivir de tal manera el cumplimiento de la voluntad de Dios, que nuestras actitudes concretas de vida, sean una proclamación del mensaje de salvación

domingo, mayo 25, 2008

Bergoglio: “Pidamos la gracia de permanecer unidos sin disgregarnos”

 
Buenos Aires, 24 May. 08 (AICA)
Celebración del Corpus Christe en la Plaza de Mayo

Celebración del Corpus Christe en la Plaza de Mayo

"Les sugiero que pidamos con énfasis la gracia de permanecer unidos como pueblo, sin disgregarnos, y unidos sin despreciarnos", dijo el al arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Jorge Mario Bergoglio, delante de la multitud que participó este sábado de la tradicional procesión del Corpus Christi alrededor de la Plaza de Mayo.

     "La memoria del amor de Jesús se hace comulgando con su carne y con su sangre. Esta es la memoria que une, el camino que aglutina a un pueblo que quiere permanecer sin disgregarse", subrayó.

     El purpurado porteño también instó a transformar la Ciudad en lugar "de projimidad, encuentro y solidaridad", y alentó a caminar sus calles "haciendo memoria de nuestros mayores, que las caminaron en la esperanza de que nosotros fuéramos mejores".

    También exhortó a caminar la ciudad mirando "hacia adelante, avizorando a nuestros hijos y nietos, deseando que las transiten en paz y justicia, en fraternidad y solidaridad".

    "Caminemos con sentido del tiempo cristiano, que es tiempo de amor, tiempo que vincula, tiempo que no levanta muros sino que tiende puentes entre las generaciones y entre los corazones, tiempo en el que se privilegia la unidad al conflicto", acotó el primado.

Intenciones
     En las intenciones de la misa se rezó por una patria "más justas", por quienes sufren la pobreza, están solos o son víctimas de la violencia "propia y ajena". También para que "pensemos los unos en los otros sin lastimarnos" y por la Iglesia en China, en adhesión a la jornada de oración convocada por el papa Benedicto XVI.

     Al concluir la misa concelebrada, el cardenal Bergoglio renovó la consagración de la ciudad y de la arquidiócesis de Buenos Aires a Nuestra Señora de Luján, para luego encabezar la tradicional procesión con el Santísimo Sacramento alrededor de la Plaza de Mayo.

    La custodia que guarda la hostia fue llevada por un grupo de jóvenes, seguida por la los abanderados de los colegios católicos, los seminaristas porteños, los jóvenes y el resto de la feligresía presente. Entre ellos, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri.

     La pública expresión de fe, que este año llevó por lema "Soy la vida", culminó con la multitud entonando el Himno Nacional Argentino y el cardenal Bergoglio impartiendo la bendición eucarística.
 
"No se dejen robar la libertad"
     Previo a la misa, el cardenal Bergoglio se dirigió a Plaza Miserere, en el barrio del Once, donde recibió a los jóvenes que dieron testimonio de su fe marchando desde cuatro puntos de la ciudad.

     Allí, el purpurado advirtió a los jóvenes sobre los "mercachifles" que pretenden "robarles la libertad", y los exhortó a "no tenerles miedo" a los "kiosqueros de la degradación" que proponen la droga y la prostitución como salida.

    "No le tengan miedo a los kiosqueros de la degradación, que viven de la trata de personas con la droga, la delincuencia, la violencia y la prostitución infantil. Esos que están acá en el mercado de todos los días", alertó.

     El cardenal Bergoglio tambie´n pidió un minuto de silencio para que "Jesús consuele" a los padres y familiares" de Cromañón, presentes en el lugar, cuyos hijos, dijo, "perdieron la vida por situaciones que todos rechazamos y lamentamos".+
http://www.aica.org/index.php?module=displaystory&story_id=12238&format=html&fech=2008-05-24

Mons. Cargnello: “Recrear el diálogo para construir la comunidad nacional”

Fuente AICA
 
Salta, 25 May. 08 (AICA)
Monseñor  Mario Antonio Cargnello

Monseñor Mario Antonio Cargnello

El arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, convocó hoy a todos los argentinos a "apostemos con audacia creativa y confianza renovada a la amistad social y al diálogo como camino para construir la comunidad nacional", y a consolidar el espíritu fraterno que  "compromete a recrear los vínculos entre todos los habitantes de esta tierra y nos ilumina para mirar al otro como hermano. Nunca unos contra otros", porque el diálogo, insistió, es "un instrumento eficaz para convertir la crisis en oportunidad".

     Durante el Tedéum en la catedral de Salta y ante la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su gabinete, el prelado también rogó a la Virgen, a la que definió como "mujer y madre, hija de Israel, amada por los musulmanes, venerada por los cristianos como Madre de Dios y madre nuestra", que acompañe a Cristina Fernández de Kirchner "en esta hora en la que le toca a usted aportar desde el lugar de presidenta, lo mejor del genio femenino a la historia de nuestra amada nación".

    Al finalizar la homilía, el padre Adolfo Barrionuevo, Iglesia Ortodoxa; pastor Hugo Vergara, Iglesia Anglicana; pastor David Thies, Iglesia Luterana; rabino Marcelo Wajcer, comunidad judía, y presbítero Pablo Martínez, Iglesia Católica, hicieron cada uno desde su fe una oración a la patria.

     Tras el rezo del Padrenuestro, la interpretación del Gloria, de Vivaldi, monseñor Cargnello impartió la bendición a las autoridades presentes, mientras la Orquesta Sinfónica Provincial interpretaba el Aleluya de Hendel.

Texto de la homilía
    Como una respuesta brotada desde lo profundo del corazón a la Palabra de Dios que nos fue proclamada, el pueblo argentino, en este día en el que celebra el 198º aniversario de la Revolución de Mayo, se "acuerda del largo camino que el Señor Dios nos ha hecho recorrer en la historia".

     Se trata de un recuerdo cargado de gratitud y de responsabilidad. De gratitud por la rica herencia que nos legaron los mayores a lo largo de estas casi veinte décadas; de responsabilidad porque el presente nos exige actuar de tal manera que, aprendiendo de los aciertos y errores del pasado enmendemos estos y profundicemos aquellos para poder pergeñar un futuro que ofrezca horizontes a las generaciones que nos han de suceder.

     La Providencia ha querido que Salta fuera la sede de la celebración nacional presidida por la Excelentísima Señora Presidenta de la Nación, por el gabinete que la acompaña en su gobierno, por representantes de los poderes legislativo y judicial y por el cuerpo diplomático acreditado en nuestra patria.

     En el horizonte de nuestras vidas de argentinos ya despunta la celebración de las fiestas del Bicentenario; acercándonos a ellas, nos sentimos felices porque, desde esta Provincia podemos decir, con humilde convicción, algunos pensamientos que surgen de cara a un nuevo siglo de vida argentina.

     Esta casa guarda la imagen bendita del Señor del Milagro, imagen que viene animando la oración por la patria rezada por tantos argentinos desde hace ya casi siete años. Aquí se nos ofrece un clima familiar en el que quisiera testimoniar una herencia y dirigir un pedido a todos mis hermanos argentinos.

     La herencia la recojo de la historia de nuestra provincia. Salta quedó marcada por su amor a la patria desde los inicios de ésta. Baste recordar lo decisivo de aquella batalla conducida por el General Manuel Belgrano el 20 de febrero de 1813 en la consolidación de nuestra independencia. Este pueblo ha madurado en cada generación su conciencia de civilidad alimentado por muchos testimonios de servicio, de desinterés, de proyección. Creo no equivocarme si destaco, espigando en su historia, tres datos que están grabados en el alma de esta provincia y que son: el mensaje del Milagro, el legado de Güemes y el servicio de Facundo de Zuviría.

     El Mensaje del Milagro: La historia de Salta se acuna en él. Desde la fundación de esta ciudad en 1.582, primero fue promesa, luego encuentro, después olvido, luego una historia de comunión profunda que culmina en 1.844 cuando el Pueblo hace un pacto con el Señor. Desde entonces el pueblo lo renueva cada año en una primavera pascual.

     La profunda experiencia del encuentro con Cristo es para cada salteño y para el pueblo, una experiencia de dignidad que se afirma y de libertad que se recrea. Como el Pueblo de Israel reconoce en el Pacto del Sinaí el nacimiento de su condición de pueblo libre, así el pueblo de Salta, al reconocer que sólo Dios es su Señor, se sabe un pueblo libre y por ello un pueblo digno. Es que la dimensión religiosa de la persona es la base de su dignidad y la custodia de su libertad. Nunca Argentina tuvo miedo a Dios, fuente de toda razón y justicia y, en esta hora es muy bueno que nos presentemos ante El para alabarlo. "Señor, Dios eterno, alegres te cantamos, a ti nuestra alabanza, a ti, Padre del cielo, te aclama la creación. Postrados ante ti los ángeles te adoran y cantan sin cesar: Santo, santo, santo, Dios del universo; llenos están los cielos y la tierra de tu gloria".

     El legado de Güemes. La figura del General Martín Miguel de Güemes es para los salteños un llamado a la entrega por la patria en la fortaleza hasta el heroísmo. Es digno de destacar cómo su acción de defensa de la patria fue acordada con San Martín y Belgrano en un plan estratégico al que fue fiel hasta la muerte porque la patria se lo pedía. Este profundo amor a la tierra que nos vio nacer constituye un aporte al modo de ser del hombre del interior. Hay un estilo generoso, cordial, respetuoso, digno, acogedor, fiel a la palabra dada, que se resume en la palabra gaucho y que cualifica al hombre y a la mujer del interior argentino. Estos valores, que están en la base de la cultura nacional profunda llaman a que los tengamos en cuenta a la hora de pensar nuestra identidad.

     El servicio de Facundo de Zuviría. A este ilustre salteño le correspondió presidir el Congreso Constituyente de 1.853 que consagró nuestra Constitución Nacional dando origen al estado organizado que consolidó el crecimiento y la evolución de la Nación. Su figura invita a recrear nuestra fidelidad a la ley y a las instituciones de la patria. Es bueno recordarlo en este año del vigésimo quinto aniversario del regreso a la democracia en la Argentina, convencidos que, como nos enseña la Iglesia, " una auténtica democracia no es sólo el resultado de un respeto formal de las reglas, sino que es el fruto de la aceptación convencida de los valores que inspiran los procedimientos democráticos: la dignidad de toda persona humana, el respeto de los derechos del hombre, la asunción del bien común como fin y criterio regulador de la vida política. Si no existe un consenso general sobre estos valores, se pierde el significado de la democracia y se compromete su estabilidad"

     Esta herencia que es viva en el corazón del pueblo, me impulsa a pedirles a todos los argentinos tres compromisos, que los obispos miembros de la Conferencia Episcopal propusimos a todo el pueblo de la patria en el andar de estos años nuestros:

     1.- Trabajemos por continuar construyendo la Nación que queremos. "Sabemos que una Nación es una comunidad de personas que comparten muchos bienes, pero, sobre todo, una historia, una cultura y un destino común. Por ello debemos volver a la raíz del amor que teje la convivencia social, entendida como un llamado de Dios". . Elijamos nuevamente ser argentinos, desarrollemos los valores indispensables de la vida social. "Sólo buenos ciudadanos, que obren con inteligencia, amor y responsabilidad, pueden edificar una sociedad y un estado más justos y solidarios" . Renovemos el esfuerzo por cancelar cada día la deuda social que grava sobre nosotros y nos impele a hacernos cargo sobre todo de los más pobres. Desde esta Salta quisiera invitar a que todos incorporemos verdaderamente en nuestro corazón de argentinos a los aborígenes como hermanos.

     2.- Renovemos nuestro esfuerzo por consolidar el sistema democrático desde el respeto a la constitución y a las instituciones de la patria. Cuando el respeto a la ley constituye un bien adquirido cada ciudadano puede sentirse libre y proyectarse dignamente. Lo contrario pone a la nación en un camino involutivo hacia la ley de la selva. ¿Será capaz nuestra generación de avanzar desde la "viveza criolla" hacia la nobleza que compromete? Es preciso continuar trabajando para elevar la calidad de la educación basándola en los inclaudicables valores puestos por Dios en el corazón del hombre. Animémonos a crecer en la honestidad, en la austeridad, en la responsabilidad por el bien común, en la solidaridad y en el espíritu de sacrificio, en la cultura de la familia, de la vida y del trabajo.

     3.- Apostemos con audacia creativa y confianza renovada a la amistad social y al diálogo como camino para construir la comunidad nacional. El espíritu amplio e incluyente que caracteriza a nuestra patria se plasmó entre otras expresiones en la voluntad de promulgar nuestra constitución para "nosotros, para nuestra posteridad y para todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino". Ese espíritu fraterno hoy nos compromete a recrear los vínculos entre todos los habitantes de esta tierra y nos ilumina para mirar al otro como hermano. Nunca unos contra otros. El diálogo es un instrumento eficaz para convertir la crisis en oportunidad. La fatiga que acompaña su ejercicio no es infecunda ni irrelevante; sabernos encontrar, escuchar y hablar hasta ponernos en el lugar del otro es garantía para avanzar socialmente. Reafirmemos nuestra convicción de que "una sociedad no crece necesariamente cuando lo hace su economía, sino sobre todo cuando madura en su capacidad de diálogo y en su habilidad para gestar consensos que se traduzcan en políticas de estado que orienten hacia un proyecto común de Nación". Avancemos en la construcción de una Patria de hermanos. No neguemos a nuestros niños y a nuestros jóvenes esta señal de esperanza.

     Hemos escuchado a Jesús en el Evangelio ofrecerse como Pan vivo bajado del cielo. Hoy la Iglesia católica celebra agradecida en su liturgia este don del Señor hecho pan que perpetúa en la Eucaristía su voluntad de entregarse por nosotros y desde dentro de nosotros darse como el pan, fruto de la tierra y del trabajo del hombre. Para los cristianos es un desafío a servir a todo hombre, como el Señor. "Oh Cristo, tú eres el Rey de la Gloria, tú el Hijo y Palabra del Padre, Tú el rey de toda la creación…Salva a tu pueblo y bendice a tu heredad… Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros como lo esperamos de ti".

     Por último, Señora Presidenta, permítame encomendarla a la protección de la Santísima Virgen, Mujer y Madre, hija de Israel, amada por los musulmanes, venerada por los cristianos como Madre de Dios y madre nuestra: Que Ella, honrada aquí como Virgen del Milagro, la acompañe en esta hora en la que le toca a usted aportar desde el lugar de presidenta, lo mejor del genio femenino a la historia de nuestra amada nación.+
 
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