Simbolos del tiempo Pacual

Símbolos del Tiempo Pascual (del libro celebremos la Pascua y Pentecostés de Miguel Varela)

Cincuenta días

Los números tienen para nosotros un atractivo especial. Solemos atribuirles significado y a veces incluso " efectos mágicos". Baste pensar en la lotería y otros juegos de azar.
En los pueblos de la Antigüedad, los números ejercían una gran influencia y estaban estrechamente vinculados a lo religioso.
El Pueblo de Israel no era ajeno a estas creencias. La Biblia revela la importancia de los números en la vida y en la historia del Pueblo de Dios y c6mo los resignificaban a la luz de su fe.
Entre los muchos números de especial significado para ellos estaba el cincuenta, que aparece sobre todo en el Antiguo Testamento cuando se hace referencia al año jubilar (año 50) texto del Libro del Levítico del mismo:


“Deberás contar siete semanas de años -siete veces siete años- de manera que el período de las siete semanas de años sume un total de cuarenta y nueve años. Entonces harás sonar un fuerte toque de trompeta: el día diez del séptimo mes -el día de la Expiación- ustedes harán sonar la trompeta en todo el país. Así santificarán el quicuagésimo año, y proclamarán una liberación para todos los habitantes del país. Este será para ustedes un Jubileo: cada uno recobrará su propiedad y regresará a su familia..." (Lv 25,8-10).
El día cincuenta (de la “fiesta de las semanas o Pentecostés” } el Pueblo de Israel presentaba gozosamente sus dones voluntarios al Señor (cfr Dt 16,9-11}. Dentro de este contexto simbólico, el número 50 evoca la alegría del Pueblo que se regocija en su Dios.
El significado que el Pueblo de Israel le asigna al número -50 es " consumación, " conclusión, sella un período de tiempo- permite inferir la importancia que daban al último día de sus fiestas, en el que algo extraordinario acontecia, algo que hacía cambiar los esquemas habituales y el actuar de los hombres.

El Cirio Pascual

“Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en ttnieblas, sino que tendrá la luz de la Vida." Juan 8,12

El Cirio Pascual acompaña todo este tiempo de fiesta, y concentra la atenci6n por el lugar destacado que ocupa en el templo. Se enciende en "el 1ucernario" -primera parte de la liturgia nocturna de la Vigilia- y permanece encendido durante toda la cincuentena pascual. Su luz es signo de la presencia de Jesús resucitado. Cristo extiende su Luz sobre la alegría del Pueblo, que celebra la victoria de la Vida sobre la muerte. Este símbolo nos invita a revisar nuestra fe.


En el Bautismo nacemos a la Vida de hijos de Dios y, para expresar lo que ocurre en nuestro interior, encendemos una vela (los padres y padrinos lo hacen por nosotros). Con este gesto, nos comprometemos a hacer crecer esta Vida Nueva alimentandonos con el Pan y la Palabra recibidos y compartidos en comunidad. Por eso este tiempo nos propone revitalizar la promesas bautismales que renovamos en la noche de la Vigilia Pascual.
Además, el cirio nos invita a una espera atenta porque el Resucitado aparece en cualquier momento y donde menos lo esperamos. Puede suceder que Dios pase a nuestro lado y, por falta de vigilancia, no logremos reconocerlo...
El dinamismo de su llama nos estimula a responder ágil y prontamente a las necesidades de los hermanos, porque s61o hay servicio cuando somos capaces de consumirnos entregando la vida en favor de los demás.
Como su luz, estamos llamados a “brillar" e iluminar el mundo (Mt 5,14) con buenas obras para que todos los hombres glorifiquen a Dios (Mt 5,16); a ser Esperanza en la desesperaci6n y Vida en toda forma de muerte.
de

Só1o a1umbra y quema quien se ha dejado llenar de luz y fuego, es decir del Espiritu de Dios.

Para ampliar

Símbolos de la luz
Símbolos de la pascua (del libro celebremos la Cuaresma y la Pascua de Stella Maris Waggio)
. La luz y el fuego

Desde siempre, la luz existe en estrecha relaci6n con la oscuridad. en la historia personal o social, una época sombría va seguida de una época luminosa: en la naturaleza, es de las oscuridades de la tierra de donde brota a la luz la nueva planta, asi como a la noche le sucede el día.
La luz también se asocia al conocimiento, al tomar conciencia de algo nuevo, frente a la oscuridad de la ignorancia.
Y porque sin luz no podríamos vivir, la luz, desde siempre, pero sobre todo en las Escrituras, simboliza la vida, la salvación, que es Él mismo (Sal 27,1; 1s 60,19-201. La luz de Dios es una luz en el camino
de los hombres (Sal 119,105), así como su Palabra (1s 2,3-5). El Mesías trae también la luz y Él mismo es luz (1s 42,6: Lc 2,32).
Las tinieblas, entonces, son símbolo del mal, la desgracia, el castigo, la perdición y la muerte (Job 18, 6.18: Am 5,18). Pero es Dios quien penetra y disipa las tinieblas (1s 60,1-2) y llama a los hombres a la luz (1s 42,7).
Jesús es la luz del mundo (Jn 8,12: 9,5) y, por ello, sus discípulos también deben serlo para los demás (Mt 5,14), convirtiéndose en reflejos de la luz de Cristo (2 Cor 4,6). Una conducta inspirada en el amor es el signo de que se esta en la luz (1 Jn 2,8-11).
Durante la primera parte de la Vigilia Pascual, llamada "lucernario", la fuente de luz es el fuego. Este, además de iluminar quema y, al quemar, purifica. Como el sol por sus rayos, el fuego simboliza la acción fecundante, purificadora e iluminadora. Por eso, en la liturgia, los simbolismos de la luz - llama e iluminar - arder se encuentran casi siempre juntos.

El cirio pascual

Entre todos los simbolismos derivados de la luz y del fuego, el cirio pascual es la expresión mas fuerte, porque los reúne a ambos.
El cirio pascual representa a Cristo resucitado, vencedor de las tinieblas y de la muerte, sol que no ñene ocaso. Se enciende con fuego nuevo, producido en completa oscuridad, porque en Pascua todo se renueva: de él se encienden todas las demas luces.
Las características de la luz son descritas en el exultety fonnan una unidad indisoluble con el anuncio de la liberación pascual. El encender el cirio es, pues, un memorial de la Pascua. Durante todo el tiempo pascual el cirio estará encendido para indicar la presencia del Resucitado entre los suyos. Toda otra luz que arda con luz natural tendrá un simbolismo derivado, al menos en parte, del cirio pascual.